sábado, 26 de noviembre de 2005

Crecimiento Aleman

Se acelera crecimiento económico

El incremento de la inversión y un fuerte crecimiento de las exportaciones impulsó la expansión del producto interno bruto (PIB) de Alemania en 0,6 por ciento en el tercer trimestre.
Fue el tercer período seguido de crecimiento trimestral y representó una aceleración desde el crecimiento de 0,2 por ciento del período abril-junio. En términos anuales, el crecimiento de la mayor economía europea se desaceleró a 1,3 por ciento desde 1,6 por ciento en el segundo trimestre.

La inversión bruta de capital subió 2,2 por ciento desde el segundo trimestre en el período julio-septiembre, el mayor incremento desde el primer trimestre de 1999, dijo la Oficina Federal de Estadísticas.

Fuerte aumento de las exportaciones

Las exportaciones ascendieron 4,7 por ciento en el trimestre, el cuarto aumento seguido y el mayor en dos años.

Esto compensó una reducción de los inventarios y la tercera baja trimestral consecutiva del consumo privado.

Alexander Koch, un economista del grupo HVB Group, dijo que la caída del gasto de las familias "no tiene precedentes en la historia alemana" y significa que el país está en una "recesión del consumo".

Una "recesión de consumo interno"

Koch dijo que la presión a la baja sobre los salarios, los elevados precios energéticos y el desempleo alto fueron las principales causas de la debilidad del consumo, que representa un 60 por ciento del PIB alemán.

En términos ajustados, la tasa de desempleo se ubicó a 11,6 por ciento en octubre, mientras que la Oficina dijo que en términos nominales, los salarios habían caído por quinto trimestre seguido en el tercer trimestre.

Ulrike Kastens, una economista de la firma Sal. Oppenheim, expresó confianza en que la inversión continuará creciendo en los próximos meses.

El Lado Oscuro del Crecimiento economico Chino

SIETE DE LAS 10 CIUDADES MÁS CONTAMINADAS DEL MUNDO SE ENCUENTRAN EN EL PAÍS ASIÁTICO
El lado oscuro del crecimiento económico chino
El 70% de los ríos está contaminado y en buena parte del país caen lluvias ácidas


REUTERS
PEKÍN.- Mientras peces muertos flotan en las aguas del contaminado río de Harbin y los habitantes de la mayor ciudad del norte de China esperan poder contar nuevamente con agua corriente en sus casas, las autoridades del país se reúnen en Pekín para discutir sobre la preocupante situación medioambiental del gigante asiático.
Los años que el Gobierno ha dedicado al fomento de la economía a cualquier precio para poder disminuir la pobreza y asegurar la estabilidad del Partido Comunista en el poder están pasando factura al territorio chino en términos de contaminación industrial.
En la actualidad, el 70% de los ríos chinos está contaminado, lo que hace que la poca agua que todavía queda esté sucia. Además, caen lluvias ácidas en más de la tercera parte de un país que, en los últimos 50 años, ha visto desaparecer más de 1.000 lagos.
También la situación del aire es asfixiante. Con siete de las 10 ciudades más contaminadas del mundo en su territorio, China ve como el 'smog' de sus ciudades causa más de 400.000 muertes al año, según informa la Agencia Internacional de la Energía.
Las fábricas a menudo ignoran las más elementales normas ambientales en aras de ganancias mayores, lo que hace que contaminen los ríos y los cielos del país.
Incluso muchas de las factorías que están equipadas con dispisitivos capaces de tratar los residuos tóxicos para reducir su impacto ambiental prefieren no utilizar estos aparatos para ahorrar costes.
En particular, la industria petroquímica es una de las mayores responsables de la contaminación de China, no sólo por sus residuos tóxicos, sino también porque es uno de los sectores donde más se utiliza el carbón, un material extremadamente peligroso en este sentido.
Los chinos, que antes se preocupaban exclusivamente por ahorrar dinero, ahora empiezan cada vez más a preocuparse también por su calidad de vida, lo que en diferentes ocasiones ha producido tensiones sociales.
Un funcionario afirmó que la contaminación le cuesta al país entre el 8% y el 15% de su Producto Interior Bruto (PIB), lo que es todavía más preocupante teniendo en cuenta que las autoridades chinas prevén cuadruplicar su PIB para 2020.